Esta es una obra de arte de una artista sorda llamada Susan Dupor. La obra se llama The Family Dog / El Perro de la Familia.
Es una de sus obras más celebres y bien poderosas ya que representa la triste realidad de la vida de muchos niños y adultos sordos cuyas familias no aprendieron la lengua de señas, o por lo menos, a comunicarse por completo con ellos. Es una pintura que ha sido mundialmente viralizada entre las personas sordas que se sienten totalmente identificadas.
Tómense un tiempo para observar la imagen. Les animo a que hablen con sus hijos, familiares, o alumnos sordos sobre sus sentimientos y cómo pueden fortalecer su sistema de apoyo. Muchas veces, ellos se sienten invisibles durante las reuniones familiares ya que muchos de los miembros de la familia se relacionan con ellos de una manera similar a como lo harían con el perro de la familia: los saludan brevemente, los acarician y juegan con ellos dos minutos y después se olvidan de ellos. Tanto el sordo, como el perro, se quedan ahi observando como las conversaciones con otras personas fluyen sin poder realmente ser participes.
Gran parte de esta interacción pobre se debe principalmente a la incapacidad de comunicarse.
Espero que al leer este post, no se pongan a la defensiva porque les resulte ridículo que haya alguien que piense de esta manera.
Lamentablemente son millones de personas sordas e hipoacúsicas que se sienten así o que nos hemos sentido así en algún momento de nuestras vidas.
La intención de este post es hacerles saber y entender que para un niño sordo es muy difícil poder expresar lo que siente, ya que al ser un niño, este suele ser inocente, indefenso, e incrédulo y no sabe que existe algo mejor o diferente.
Un ejemplo bien claro sobre un tipo de experiencia audista que genera sentimientos como el de sentirse como el perro de la familia es cuando el niño sordo tiene que vivir el síndrome de la cena familiar. (Para mas info al respecto, les recomiendo que vean mi post sobre el síndrome de la cena familiar).
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